"LA INTOLERANCIA SE CURA VIAJANDO"

martes, 8 de diciembre de 2009

El fisio viajero en prensa!!! ESTE MES EN RUNNER'S

Para los grandes seguidores del blog, informaros que ya desde hace tiempo tenía preparada un pequeña sorpresa, y que por fin ha salido a la luz.

Resulta que desde hace un par de años colaboro con la revista RUNNER'S en la sección de salud, escribiendo algún que otro artículo sobre recuperación de lesiones, etc.

Pues bien, estando en Australia, uno de los redactores (Depa) era seguidor del blog, así que surgió la idea de escribir un artículo sobre la carrera que corrí en Melbourne y la aventura australiana en general.

Fruto de esa idea, y aprovechando el despertar de mi vena literaria, fue surgiendo una pequeña historia que al final tomó forma de artículo periodístico, con el que la verdad he quedado muy contento. Me gusta mucho como ha quedado, y sobre todo las fotos, que también son mías. 4 páginas donde podréis ver un pequeño pedazito de la aventura que habéis seguido en este blog.

Además, este mes también sale un artículo en la sección de salud, sobre la recuperación de las lesiones en el corredor. No tan literario como el otro, pero también interesante, creo yo.

ASÍ QUE YA ESTÁIS CORRIENDO A LOS KIOSKOS A POR LA REVISTA!!

sábado, 14 de noviembre de 2009

HABLANDO EN SERbIO



Cuando el autobús que nos trasladaba del aeropuerto al hotel empezó a adentrarse en los barrios más periféricos de Belgrado, un repentino silencio invadió el ambiente. Jugadores, técnicos, directivos y periodistas, mirábamos a través de las ventanillas con una mezcla de asombro, curiosidad, y cierto aire de tristeza. En aquel momento las bromas, la emoción del partido, y la preocupación por los lesionados o por la táctica del rival, pasaron a un segundo plano.

Edificios viejos y ruinosos, coches antiguos y caos circulatorio, calles sin asfaltar, chatarra por las esquinas... Por un instante, comprendimos el por qué de los fanatismos y la competitividad balcánicos, su facilidad para aprender idiomas, o su desconfianza en la clase política.

Belgrado es una ciudad gris. Gris el cielo, grises sus edificios, y grises las miradas de sus gentes. En sus retinas aún perdura el horror de una guerra que separó familias, destruyó ciudades, y rompió el país en mil pedazos. Las heridas de guerra aún permanecen abiertas, y más allá del desarrollo económico en forma de autovías o coches lujosos, a poco observador que sea uno verá cómo la gente lucha por salir adelante con su pequeño negocio o su puesto de fruta en la esquina. Otros han dejado de luchar, o simplemente no han tenido siquiera la oportunidad de poder hacerlo, y mendigan por las calles o se refugian en su cartón de vino.

Para los que hemos tenido la suerte de no vivir la crueldad de una guerra en nuestras propias carnes, todo esto resulta poco menos que incomprensible. Parece algo más propio de un libro de historia medieval de 5º, batallas a caballo, señores feudales y esclavos incluidos. Pero cuando uno le pone cara al problema, se cuestiona el porqué de tanta irracionalidad en este supuesto mundo desarrollado en el que vivimos. Por qué en el siglo XXI aún podemos odiar a alguien por su origen, raza o color de piel. O por qué somos capaces de matar por la propiedad de una tierra o de una lengua. A veces pienso que EL SER HUMANO ES EL MENOS HUMANO DE LOS SERES.



Más allá de todo eso, Belgrado es una ciudad diferente. Puramente balcánica, y para nada contaminada por el turismo, conserva intactos todos los matices de la Serbia más histórica. Con casi 2 millones de habitantes y apenas 200 españoles, Belgrado está bañada por dos grandes ríos: el Sava y el Danubio. Ambos navegables, gran parte de la vida de la ciudad gira en torno a los ríos. Desde un puerto fluvial, hasta un conjunto de unos 10 bares y discotecas flotantes (las cuales no visité, lo sé de oídas...jajaja).

Mientras que los barrios periféricos muestran la vida más auténtica de la ciudad, el centro refleja la historia centenaria de Belgrado. Numerosas veces invadida por diferentes pueblos, Belgrado está coronada por una espectacular fortaleza reconvertida en parque, que ofrece unas vistas preciosas de la Llanura Panónica.

Calles anchas y grandes plazas conforman el centro más moderno, y en mitad de la calle principal un gran edificio con una bandera de España: el Instituto Cervantes. El español está de moda. Mucha gente es capaz de mantener una conversación en español sin problemas. Buena excusa para charlar un rato con alguna bella joven serbia...



3 días no es un período suficiente para conocer un país ni una ciudad. Pero en el caso de Belgrado, suficiente para tocarme la fibra y hacerme pensar. Sólo una última reflexión: la antigua Yugoslavia estaba formada por diferentes provincias (Serbia, Montenegro, Kosovo, Macedonia, Croacia...), que se odiaban y que luchaban desde hace siglos por su independencia. España está formada por diferentes comunidades (Cataluña, Galicia, País Vasco) que luchan constantemente por su independencia. Espero que ese odio que percibo que está empezando a existir, no llegue a donde no debería llegar JAMÁS, y que algún día los españoles podamos presumir de ser seres civilizados, y sobre todo HUMANOS.

martes, 10 de noviembre de 2009

Próxima parada: BELGRADO (Serbia)!!




Pasadas ya las semanas de adaptación a la vida real, y con las vivencias australianas aún en la retina, llega el momento de pasar página.

Nuevos proyectos aparecen en el horizonte, nuevas ilusiones, y nuevas inquietudes. Ganas de trabajar y de poner en práctica todo lo aprendido en mi famosa aventura en las antípodas. Con toda la tranquilidad del mundo, y sin los estreses y agobios de meses atrás, que aún me queda mucha vida por delante y no se pueden gastar todos los cartuchos en la primera batalla.


Ya con cierta perspectiva puedo decir (y creo que la gente que me rodea lo ha notado), que la famosa Aventura en las Antípodas ha sido toda una inyección de energía. Me encuentro feliz, duermo mejor, tengo las ideas más claras, mejor humor... y ganas de comerme el mundo.


Y por aquéllo de que cuando las cosas van bien, parece que todo viene rodado, ayer he recibido la noticia de que "El fisio viajero" seguirá sus andanzas por el mundo este mismo fin de semana. Con algo que me traerá grandes recuerdos de mi época del balonmano y que me llena de ilusión al 200%: viajo con el Club Balonmano Logroño a su partido de debut en Europa (Copa EHF), que jugarán este domingo contra el Estrella Roja de Belgrado en Serbia.

La razón es echar una mano al servicio médico (El Dr. Pedro Terreros y el fisio César de la Cruz), y hacer de pequeño apoyo moral a ese gran entrenador y mejor persona que tienen: Jota. Muchos son los viajes que compartí con Jota en su etapa de 2º entrenador en el BM Valladolid, y creo que en estos momentos tan importantes y en un partido tan crucial, cualquier apoyo es poco. Ya hace dos temporadas acudí al rescate cuando el club lo necesitó, y allí estaré esta vez. Me vestiré los colores franjivino y defenderé a mi 2º club a muerte.


La ilusión que me hace volver a vivir un partido importante desde dentro del vestuario, con la mezcla de emociones, nervios, ansiedad... sólo la saben quienes lo hayan vivido.


Grandes recuerdos de momentos vividos en el año de Champions con el BM Valladolid me vienen a la mente: goles imposibles, celebraciones, horas de avión, alegrías y penas vividas juntos, y sobre todo, grandes amigos que aún hoy conservo. Y ha llegado el momento de revivirlo: VUELVO A EUROPA!!








Belgrado me espera. Serbia es un país en el que nunca he estado, y llevaba tiempo con ganas de visitar la antigua Yugoslavia ("el tiempo acaba poniendo a cada uno en sus sitio??")

Seguro que el tiempo para hacer turismo será más bien poco, pero siempre se saca un hueco para ver cosas y traer nuevas aventuras que contar. Esas seguro que no van a faltar.

miércoles, 21 de octubre de 2009

HOGAR, DULCE HOGAR

Bueno, pues como ya prometí, el blog no se acababa en Australia...

Después de 3 días de recuperación (este jet lag ha sido mucho más leve que el de la ida), ya estoy de vuelta a la vida normal. Casa, familia, comida y amigos puestos al orden, y hoy he empezado a trabajar.

Aunque supuestamente debería haber sido toda una carga, tengo que reconocer que en cierto modo hasta tenía ganas. Me apetecía volver a ver a mis compañeros, a mis pacientes, volver a vestirme de blanco (es lo que tenemos los del Madrid...), y en definitiva, volver a la vida normal.

Comienza una nueva etapa, y por suerte ya tengo a la vista nuevos proyectos, ideas y cosas que me ilusionan para empezar aún con más ganas. Ya os iré poniendo al día, pero de principio lo que tengo claro es que me voy a tomar las cosas con muuuucha más tranquilidad. Nada de agobios, abarcar cosas imposibles o intentar solucionar lo insolucionable.
EL ESPÍRITU AUSTRALIANO SIGUE VIVO.

viernes, 16 de octubre de 2009

ŋäliŋali


En el dialescto de la tribu aborígen Gupapuyŋu, ŋäliŋali quiere decir "lugar lleno de tranquilidad y libre de problemas". Australia ha sido sin duda ŋäliŋali para mí durante este viaje, y por eso siempre llevaré esa palabra conmigo en un lugar seguro, y que me permita recordarla cada vez que cualquiera de las cosas que nos estresan, nos preocupan y nos agobian en la vida diaria ocupen mi mente.
A escasas dos horas de coger mi vuelo, y a escasos 5 minutos de dirigirme al aeropuerto para dar por finalizada mi gran aventura australiana, he querido dejar la última despedida para vosotros. Aunque no lo creáis, el hecho de que me hayáis seguido tan de cerca me ha hecho sentirme un poquito como en casa, y ha hecho que yo también me haya hecho adicto a mi propio blog. Ha sido todo un placer leer vuestros comentarios casi al instante y poder compartir con vosotros esta experiencia inolvidable, de la que creo que también os lleváis un cachito.
Mi familia australiana ha ejercido como tal y me han acogido en su casa como uno más. Los diferentes personajes que me he ido encontrando por el camino, mochileros aventureros o trabajadores en viaje de negocios, canadienses, israelíes o malayos, se merecen también un pequeño hueco por todo lo que me han aportado.
Y a la gente que desinteresadamente ha compartido su tiempo de trabajo y sus conocimientos conmigo... mil gracias. Habéis cimentado las bases de mis conocimientos, y me habéis hecho valorar mucho más lo que ya tengo.
A mis personas más cercanas, familia, amigos y novia, mil gracias por seguir estando ahí a pesar de todo. Tan lejos...y tan cerca.
A esa pequeña gran familia Benaventina por ser mis mayores seguidores.
A mis pacientes, porque vuestro "echarme de menos" supone mucho mara mí. A los que fueron pacientes y ahora son grandes amigos... gracias.
A mis compañeros y jefes, por permitirme llegar hasta aquí.
Y por qué no, me agradezco a mí mismo por haberme dado esta gran oportunidad que no olvidaré nunca. Gracias Australia por ser mi ŋäliŋali.
PD: para alegría de muchos y tristeza de otros, este blog seguirá. La aventura no acaba aquí... Nos vemos pronto!!

miércoles, 14 de octubre de 2009

LAS CASUALIDADES Y EL DESTINO




Hay una frase que suelo utilizar mucho y es la de "El tiempo pone a cada uno en su sitio". Creo que es útil para muchas cosas, y que además se suele cumplir. Traducido al refranero castellano, podría ser algo así como "Cada uno tiene lo que se merece" o "A cada cerdo le llega su San Martín". Para lo bueno, y para lo malo.


Pero lo cierto es que estos últimos días le he encontrado otro sentido a la frasecita: el sentido literal. Melbourne está siendo un sitio ideal para terminar el viaje. La ciudad me encanta y me encuentro muy agusto, la gente que estoy conociendo aquí me está aportando muchas cosas nuevas, y el destino parece haberme traido hasta aquí, como si este fuera el sitio en el que tenía que acabar la aventura. Como que el tiempo me ha acabado poniendo en mi sitio. Siguiendo con el refranero castellano, le podríamos llamar "Todos los caminos llevan a Roma" (en este caso a Melbourne). Y eso me gusta.


La cosa es que en estos últimos días se han ido dando un cúmulo de casualidades de esas que no pueden ser tan casuales.


Para empezar, y siguiendo con mi tradición siempre que viajo al extranjero, no podía pasar el viaje sin ponerme un dorsal en el pecho. Así que el pasado domingo me inscribí en una carrera de 5km que se organizaba junto con el Maratón de Melbourne (no era plan de correr el maratón, que para eso me quedan unos añitos aún). Pues resulta que estaba yo en la salida y me pareció ver una cara conocida, pero tampoco le dí mayor importancia. Pero claro, a los 50m de salir, esa cara conocida llevaba una equipación conocida, así que ya era mucha coincidencia. Me pongo a su altura y era... Sonia Bejarano. Atleta española, campeona de Europa de Cross con España en 2007, que conocía de cuando ambos entrenábamos en Salamanca. Tócate los huevos!! Y nos vamos a encontrar a 16000km de casa! Qué pequeño es el mundo....


Pasamos los primeros 500m con los "y tú qué coño haces aquí" y "cómo te va la vida" de rigor (una situación de lo más rocambolesca, vamos), así que dejé escapar al grupo de cabeza, y cuando me quise dar cuenta, ya no me dio tiempo a cogerlos a todos. A la entrada del estadio ya sólo tenía a uno por delante pero no hubo manera de alcanzarlo así que llegué segundo. Una pena porque era una carrera para haber ganado y estrenar mi palmarés de victorias en el extranjero (2º también en Helsinki en 2005). Fotos de rigor, medallita, y a casa más contento y sorprendido que unas pascuas.





Pero es que resulta que además también apareció por allí otro español que acababa de correr la maratón, y hablando, hablando, resulta que teníamos un par de amigos en común... Y además también resulta que una de las atletas australianas que conocí porque entrena aquí con Sonia, conocía a una de las fisios que iba a visitar yo, y resulta que tenía cita con ella el mismo día que yo iba y a la misma hora...!! Vamos, que lo de que el mundo es pequeño, se me queda pequeño en este caso...


Aparte de estas casualidades o este destino tan caprichoso, contaros que he tenido unos días bastante ocupados pero muy fructíferos. Estoy conociendo gente muy interesante, con otros puntos de vista diferentes a los que había visto en Brisbane o Sydney, y que me están aportando mucho para rematar mi formación aquí. Mañana remato la faena con el fisio del equipo que ha ganado la liga de fútbol australiano (ese deporte raro en el que corren y saltan con un balón ovalado), del que hablan muy buenas cosas por aquí. A ver si es verdad que se tiene merecida la fama...

En esta foto, con Liz Molloy, la fisio de la selección australiana de atletismo.







Es un placer poder acabar este viaje con tan buen sabor de boca, y tener la sensación (al igual que justo antes de iniciarlo) del deber cumplido, y de la tranquilidad que da haber saldado una cuenta pendiente conmigo mismo. Seguramente, en unos días el tiempo me acabará poniendo en mi sitio. El que tengo reservado rodeado de mis cosas y de mi gente. Home, sweet home.

sábado, 10 de octubre de 2009

MELBOURNE



Melbourne...
Cuando a uno le hablan de París, se le viene a la mente la Torre Eiffel. Si te hablan de Nueva York, el Empire State (que las Torres Gemelas las han cerrado por reforma), y de Sydney, el edificio de la Ópera. Pero si te hablan de Melbourne... en qué piensas??

Precisamente el día que llegué aquí, había un reportaje en un periódico local hablando sobre esto. Se planteaban por qué Melbourne no tenía ningún icono que la identificara y sin embargo Sydney sí (aquí hay una gran rivalidad Sydney-Melbourne, igual que Madrid-Barcelona).

Lo cierto es que con sólo 3 días aquí me ha bastado para hacerme una idea bastante buena de la ciudad. Y mi conclusión es que no le hace falta ningún icono, Melbourne es un icono en sí misma! Una ciudad hecha con un gusto exquisito, mezclando edificios coloniales con modernidades, y con un ambiente genial por las calles. Es sin duda una ciudad especial para darse un paseo por el centro, callejear por rincones recónditos, y encontrarse desde músicos tocando en cada esquina, hasta los restaurantes más sofisticados.

A cada paso que das, si estás medianamente atento, descubres pequeñas sorpresas en forma de esculturas, tranvías antiguos que aún circulan o parques y complejos deportivos estratosféricos. Que por cierto, están construyendo aquí un estadio que se tira un aire al "Nido" de Pekín, y que seguro que de aquí a no mucho dará que hablar. Y si no, al tiempo...

En resumen, y que pese a que había dicho que visitar ciudades ya no me entusiasmaba en este viaje, Melbourne me ha sorprendido muuuy gratamente, y me declaro oficialmente enamorado de esta ciudad.

Quizá a ello también colaboren varios pequeños detalles:
- El primero, es que estoy alojado en casa de unos amigos que conocí en la famosa boda tropical de Townsville (ufff, qué lejos queda aquéllo, verdad?), y viven ni más ni menos que un apartamento en el Eureka Complex, que es un "pequeño" edificio de 88 plantas en pleno centro. Para ser más concreto, es el edificio más alto de Australia, y uno de los "iconos" de la ciudad. Por aquí dicen que es el más alto del hemisferio sur, pero es que eso ya lo he escuchado con la Sydney Tower y la Auckland Tower... Será que miden exactamente lo mismo los tres...???
(Os habéis parado a pensar alguna vez por qué a cada sitio que vas, por pequeño pueblo que sea, siempre tiene algo que es lo más "x" del Mundo o de Europa? Alguien ha visto alguna vez esas supuestas listas donde se registran todos esos ránkings de récords?? Yo no....)

- El segundo detalle, es que Melbourne tiene aquí cerquita una de las cosas más espectaculares que he visto en el viaje: la Great Ocean Road. Una carretera que recorre la costa durante 300km por acantilados, bosques y playas, que son una maravilla. Y si además tienes un día soleado y un guía majete como ha sido el caso, pues todo perfecto!



Aquí os dejo este pequeño regalo desde "Los Doce Apóstoles", uno de los sitios mágicos de la costa. Para variar, el viento, el ruido, la luz y la operadora de cámara no eran lo mejor, pero es lo que había!


jueves, 8 de octubre de 2009

"EL FISIO"

Desde pequeño siempre me han llamado Dani, pero cada vez que oía a mi madre llamarme “Daniel”(con ese tono tan típico de madre...), intuía que algo gordo pasaba o que alguna pifia había tramado. Los Juan Carlos, José Luises o Ana Isabeles seguro que saben a lo que me refiero...


El caso es que en el momento en el que llamamos a alguien por un diminutivo estamos sin querer haciéndolo mucho más cercano y traspasando una pequeña barrera de confianza. Si os habéis dado cuenta, es algo que nos ocurre frecuentemente a los fisios. Raro es el caso en que alguien te llama “Fisioterapeuta”, y si lo hace, le miras con cara rara o esperas un par de minutos para dejar bien claro que eres “EL FISIO”. La palabra completa la utilizamos sólo para el currículum, los congresos o las cosas serias...


Sin embargo, si pensáis un poco, el resto de las profesiones de la salud no gozan de esa especie de confianza por parte de los pacientes. A ningún paciente se le ocurre por nada del mundo llamar al Doctor “Doc”, o al psicólogo “psico” . Éstos se encuentran una especie de escalón por encima, y todo el mundo tiene bien claro que hay ciertas barreras que no se pueden traspasar. Para eso están las batas blancas, el fonendo colgando del cuello y los diplomas en la pared.


Involuntariamente, nuestro trabajo, o nuestra forma de trabajar, nos van situando en ciertas posiciones con respecto a los pacientes. Un fisio pasa muchas horas con un paciente, escucha sus problemas, sufre con él o se ilusiona con sus progresos. Se convierte en su confesor, en su mejor amigo, y a veces en su mayor enemigo, en quien le hace sufrir. Se arrastra por el suelo si hace falta para enseñarle a hacer un ejercicio, y se pega la sudada padre si hay que trabajar en el gimnasio o correr con él. Un médico rara vez traspasa la barrera mesa-silla. Y si lo hace, pasa a ser un gran médico... Esa es la pequeña diferencia.


“El jefe" lo cuenta siempre con un ejemplo muy gráfico: cuando le da el alta un paciente que ha operado y hemos recuperado en la clínica, éste se acerca al Doctor y le da la mano con un sincero “Muchas gracias, Doctor”. Y acto seguido se da la vuelta y le pega pedazo de abrazo al fisio, acompañado de varias palmaditas en la espalda y un par de coñas en plan cómplice. A la semana siguiente quedan para tomar unas cañas y se llaman de vez en cuando para ver qué tal les va la vida. El caso es que el Doctor se queja porque a nosotros nos dan los abrazos... pero yo me quejo porque los jamones se los mandan a él!! Nunca llueve a gusto de todos....


Por lo general, un fisio suele tener esa especie de virtud de la cercanía. A veces ponemos el contrapunto de “humanización” a esa especie de figura intocable que habla en lenguaje raro en la que se han convertido muchos compañeros médicos. Y que siga siendo así. No deberíamos perder esa seña de identidad que tanto nos caracteriza empeñándonos en aprender técnicas y métodos como ya dije en el anterior post. Dediquemos un poquito más de tiempo y cariño a cada paciente, y seguro que todo va mucho mejor. Una vez más, eso no lo dice la ciencia, eso lo digo yo... y otros muchos otros compañeros que piensan como yo.


Y me ha dado por pensar todo esto a raiz de una pequeña-gran diferencia que he visto aquí con respecto a España. El campo del fisio se encuentra aquí mucho más cercano al del preparador físico o al del recuperador, que a la rehabilitación puramente dicha. El trabajo de camilla es mucho menor, y el de ejercicio físico como método de recuperación mucho mayor. Y no sólo hablo de deportistas, sino de pacientes de todo tipo. Aquí he visto trabajar con su plan de ejercicio físico en el gimnasio, desde amas de casa hasta jubilados. Y nada de tablas de ejercicio estándar: trabajo personalizado y con el fisio al pie del cañón.



Siempre he dicho que en España tenemos demasiado apego a la camilla. Nos cuesta mucho quitarnos el pijama blanco y ponernos el mono de trabajo para ir con el paciente a la piscina, al entrenamiento o a su puesto de trabajo. Es mucho más cómodo poner 5min de Ultrasonido y 10min de microondas, no hay duda. Pero el que busque comodidad que se dedique a cultivar amapolas, que aquí estamos para otra cosa.


Debemos ponernos las pilas y avanzar un paso más allá. Hay que formarse mucho más en acondicionamiento físico para trasladar todo eso que tan bien sabemos en la teoría, a la vida real. Pretender que un paciente mejore por ponerle las manos encima 45min al día, cuando tiene otras 23h 15min para empeorar él solito.... es quedarse muy corto. Habrá que educarle en salud, y eso pasa por ejercicio físico, salud mental y fuerza de voluntad. (CUERPO, MENTE Y ALMA). Allá se las arregle cada uno como pueda para conseguirlo. No voy a contar aquí todos los secretos...

Y por supuesto hay que empezar a acercarse un poco más a otro profesional que tenemos olvidado: el Licenciado en Actividad Física. Hay tantas cosas que podemos aprender de ellos! Y ellos de nosotros! De momento puedo decir que aquí mi amiga Suki Hobson es hasta ahora la que más conocimientos me ha aportado... y no es fisio precisamente.


Por el momento, y esperemos que por mucho tiempo, orgulloso de seguir siendo "EL FISIO". El traje y la corbata no están hechos para mí (mal que les pese a algunos...). Yo seguiré yendo a trabajar en chándal y con mi bici plegable.

martes, 6 de octubre de 2009

Tormenta de arena, Tsunami, y ahora... TEMPORAL DE NIEVE



Vamos, que voy de mal en peor...

Supongo que la noticia no habrá traspasado fronteras como la de Sydney, pero ayer ha caido una nevada espectacular en la isla norte (algo muy atípico en estas épocas), dejando atrapados a más de 200 coches en una carretera... por la que yo había pasado el día anterior!! Otra vez me libro por los pelos, jeje.



La verdad es que al igual que la primera parte del viaje ha sido genial, ésta segunda ha estado muy condicionada por el tiempo. No he llegado a ver ni una gota de nieve, pero no ha parado de diluviar en dos días y ha hecho un frío digno del mejor de los inviernos castellanos. Así que poquita cosa he podido ver.


Eso sí, he tenido suerte y he podido salir en un barquito a ver unas islas en la zona norte. Aunque hacía un frío que pelaba y el barco se movía más que los precios, mereció la pena. Hasta nos dejaron 45min en una isla desierta! En esta zona del norte, el agua es de un color azul turquesa que combinado con el verde de las praderas, hasta hace daño a la vista...



Además, siguiendo con mi tónica, he tenido otra aventura más: mi coche se quedó sin batería en un camino que llevaba a un mirador y tuvo que venir la grúa a echarme un cable! Tardaron más de hora y media porque no me encontraban! Pero bueno, nada grave. Me pusieron las pinzas, me arrancaron el coche...y hasta hoy.



Para acabar, ayer me decidí a buscar un alojamiento alternativo, por vivir algo diferente, y fui a parar a un sitio llamado Piano Hill Farm, que es una granja que también tienen preparada como alojamiento. La verdad es que sin duda ha sido el mejor sitio en el que he estado hasta ahora. En mitad del campo, rodeados de caballos, y hasta con huertecito ecológico auto-servicio. Estábamos sólo 5 personas y un chico joven que era el dueño, y la verdad es que en todo este tiempo ha sido lo más parecido a un hogar que he visto... Sin duda ha merecido la pena.

Ahora ya estoy de vuelta en Auckland. Ya sólo me queda un día aquí, pero la verdad es que es como si ya hubiera terminado el viaje. Después de ver todo lo que esconde Nueva Zelanda, apetece bastante poco visitar una ciudad. Otra más... Eso sí, esta tarde he estado en un parque que tienen aquí, tipo La Casa de Campo (pero sin mujeres de dudosa profesión), y aparte de bonito, lo más sorprente es que tienen ovejas y vacas sueltas por todos lados!! Éstas en España no duraban 2 noches, ya te lo digo yo...




En 2 días en Melbourne, y en 12... en casa. Ya me habéis preparado la fiesta sopresa?? No me lo digáis, claro, que sino deja de ser sorpresa!
UN ABRAZO

viernes, 2 de octubre de 2009

NUEVA ZELANDA: Las antípodas, o "el mundo al revés"



Mis primeros recuerdos de Nueva Zelanda se remontan a no hace muchos años. Es ese país que uno sabe que existe, que está muy lejos, pero pocas cosas más. Que vemos en geografía, y de pasada, porque son las verdaderas antípodas de España. Así que ya más lejos no me puedo ir!
Cuando te vas haciendo mayor, vas oyendo que es un país apasionante, un destino turístico deseado por muchos. Y luego te enteras de que la trilogía de El Señor de los Anillos se rodó aquí. Y entonces dices: "ah, ¿pero que eso era real? ¿Que no estaba montado por ordenador?" Pues no estaba montado por ordenador, DOY FE.

La verdad es que sólo llevo aquí 3 días y no sé por donde empezar a contaros. Se me acumulan las imágenes, las sensaciones vividas y la cantidad de cosas que he visto que no parecen reales. Creo que aún no lo he asimilado... Ahora entenderéis a qué me refiero.

Nueva Zelanda es un país, al igual que Australia, relativamente nuevo. Tanto como nación, como geológicamente. Consta de 2 islas (norte y sur) que son de origen volcánico. De hecho, la mayor parte de Nueva Zelanda se asienta sobre volcanes, muchos de ellos aún activos en forma de géiseres, lodos, etc. Por ejemplo, la ciudad de Auckland viven encima de más de 50 conos volcánicos! Ahora entiendo por qué es el país de los deportes de riesgo...

En cuanto a cultura, guarda una mezcla de civilización moderna y maorí, que la hace única. Aquí han sabido convivir mucho mejor con las culturas ancestrales y, al contrario que los aborígenes en Australia, los maoríes viven integrados completamente pero manteniendo sus costumbres. Todo un ejemplo de convivencia.





Pero vamos a hablar de mi viaje...


El primer día fue algo impactante. Pensé que a estas alturas pocas cosas me podían impactar, pero aún quedaba mucho. Con mi coche alquilado (esta vez tocaba coche en vez de furgoneta), recorrí la Península de Coromandel, en la isla norte. Zona montañosa, con preciosas playas e islas, y en la que se respira tranquilidad por los 4 costados. El paisaje es sencillamente genial, un regalo para la vista. Montañas perfectamente redondeadas, de un verde brillante, que se entremezclan con bosques, llanuras, y bahías. Carreteras que se adentran por todas esas zonas y que recuerdan al anuncio ese de BMW de "¿Te gusta conducir?". Sí, me encanta, pero por la izquierda no!! Ese día me dediqué a recorrer todas esas tierras, haciendo incluso un montón de km por carreteras sin asfaltar. Que aquí hay muchas!



El segundo día (ayer), después de dar una bonita vuelta por los campos neozelandeses (el gracioso del GPS me metió por una carretera cortada y rodeé más de 50km por caminos) estuve visitando Rotorua, un valle termal que es lo más visitado de Nueva Zelanda. Una acumulación de géiseres, aguas termales naturales y vapores que salen por todos lados que impacta que no veas. Después un rodajito de 1hora por un bosque en el que no entraba ni la luz, y por la noche, lo más esperado: visita a un poblado maorí. Donde cuentan sus costumbres culturales, hacen (y enseñan a hacer) la famosa danza de la Haka, y te invitan a cenar con su comida típica. Un acercamiento que ayuda a entender muchas cosas...




Y hoy... a ver por donde empiezo. Digamos que me he despertado con espíritu aventurero...jeje. Resulta que a escasos km de donde he pasado la noche, estaba Taupo, la capital mundial del paracaidismo. Y he dicho, pues ya de estar aquí... Así que sin pensarlo demasiado, he ido directamente a una de las empresas que organizan los saltos, y en cuestión de 15min ya estaba montado en el avión preparado para saltar. Es una de esas cosas que se hacen "ahora o nunca", y que no hay que pensarlas mucho, que sino... Saltas en tándem con un monitor, tú no tienes que hacer nada. Bueno, sí: gritar todo lo que puedas!!

Os puedo decir que la caida en sí, aunque acojona lo suyo, no da miedo. Más bien emociona verse durante 1min a más de 200km/h en caida libre hasta que se abre el paracaídas. A partir de ahí, un auténtico placer. Te ves flotando en el aire, con unas vistas 360º acojonantes, y disfrutas 100%. Pero sin duda el momento más chungo es cuando estás, justo antes de saltar, sentado al borde del avión con los pies colgando, ufff!! Pero como es el monitor el que salta, no quedan más cojones que tirar pa' abajo!

Desgraciadamente no os puedo adjuntar documento gráfico de la hazaña, aunque tranquilos que lo tengo. Al lado baja un tío con una videocámara que lo graba todo y saca fotos. Pero las tengo en CD y las tengo que pasar al portátil, así que paciencia...


Por si fuera poco, con la adrenalina por las nubes, cogí el coche y me fui a visitar las cuevas de Waitomo, donde aparte de visitar unas cuevass preciosas llenas de luciérnagas, organizan también actividades de aventura. Y yo he elegido... descender un cañón de 50m haciendo rappel. Puede parecer emocionante, pero viniendo de saltar al vacío de 6000m...una mierda....jajaja. No, en serio, una chulada. Todo es superseguro y no te sientes para nada en riesgo, y te dedicas a disfrutar de las maravillas de la naturaleza.





Así que mañana creo que voy a dedicarme a descansar mayormente...

UN ABRAZO A TODOS y ya os seguiré contando, que quedan poquitos capítulos del viaje!!







martes, 29 de septiembre de 2009

VER LAS COSAS CON PERSPECTIVA

Normalmente alejarse de las cosas y verlas desde la distancia, siempre ayuda a clarificarlo todo. Hoy, durante las 3 horas de avion hasta Nueva Zelanda, me ha dado tiempo a hacer balance del tiempo que llevo aqui ya con cierta perspectiva. Hace ya 6 semanas, y aunque no lo parezca, entre aventura y aventura (que es lo que principalmente cuento en el blog) voy tambien sumando aventuras profesionales. Pero necesitaba un tiempo para que hicieran poso y poder empezar a sacar conclusiones en claro. Y ya que estoy, las comparto con vosotros que me estais acompanando en este viaje.

(De antemano pido disculpas porque estoy en un ordenador sin tildes y sin esa letra tan caracteristica de nuestra "Espana")

Como bien dije al principio del blog, si algo me traia hasta aqui eran las ganas de mejorar. Habia que hacer una pausa y plantearse nuevos retos, y este era el momento perfecto. Pero teniendo bien claro que aqui no solo vengo en mi nombre, sino en el de todo mi equipo de trabajo, e incluso en el de todo el colectivo de la Fisioterapia. Con la necesidad de demostrar que en ese pequeno pais mediterraneo, tambien sabemos hacer las cosas bien.

Para los menos familiarizados con el mundillo, deciros que la Fisioterapia hace ya tiempo que dejo de ser lo que era. Los masajes, los ultrasonidos y las corrientes son tecnicas que pertenecen ya a otra generacion. Las nuevas generaciones de fisios estamos mucho mas preparados, mejor formados, y sobre todo, y como dice el jefe, TENEMOS HAMBRE. Hambre de mejorar y de escalar posiciones en el complicado mundo sanitario. Estamos pasando de ser el ultimo mono a formar una parte fundamental en la mayoria de los campos de la salud.
Hoy en dia los fisios ya estamos trabajando en unidades de neurologia, reumatologia, cardiologia o ginecologia. Somos un profesional mas con el que contar y que cuenta con unos conocimientos que dan una pequena vuelta de tuerca a la medicina convencional. Y seguiremos creciendo.

La gran diferencia con Australia se encuentra en que ellos ya han pasado esa fase: ya han crecido y estan bien posicionados. Muy bien, de hecho. Seria impensable sino imaginarse en Espana el Principe de Asturias a un fisio, verdad? Francia, Alemania, o los Paises Nordicos tambien van un paso por delante en este aspecto. Nosotros aun estamos en ello.

Y quiza estamos queriendo crecer demasiado rapido, y por culpa de ese complejo de inferioridad tan tipico espanol, nos subimos al tren de cualquier moda que venga de fuera y que tenga nombre bonito, llamese Osteopatia, Induccion Miofascial, o metodo Maitland (os dais cuenta de que todas las grandes formaciones vienen de fuera?? Ninguna espanola...) Y por esa necesidad de hacernos sentir importantes, decimos "yo es que soy osteopata", o "yo hago puncion seca". Sin darnos cuenta de que tenemos una riqueza y una variedad de formacion que ya quisieran en otros sitios.

La Fisioterapia Australiana, sin duda ha crecido mucho. Pero hacia donde? Se ha embarcado en el camino irrefutable de la ciencia, convirtiendola en una religion. No encontrareis por aqui fisio que utilice nada que no este demostrado por estudios cientificos. Y esto les ha llevado a hacer cientos de estudios a mi modo de ver absurdos, para demostrar cosas que ya todos sabemos solo por el hecho de tener "ciencia" que lo avale. Por poner un ejemplo, todos sabemos que sentarse en mala posicion provoca dolor de espalda, pero ellos necesitan sentar a 50 tios en mala posicion durante 15 dias, para tener la certeza de que en el 73'8% de los casos aumenta el dolor de espalda en 4'1 puntos segun la Escala Visual Analogica. Muy bien, y muchas gracias por la informacion, pero a mi las cifras no me dicen nada.

Y con esto no quiero decir que la Fisioterapia no deba avanzar hacia el camino de la ciencia (que debe), sino que no debemos caer en el error de estrechar tanto nuestras miras. Mi ciencia es la que me dice que nunca veo dos pacientes iguales, y que mientras la lumbalgia de uno viene por un defecto tecnico en el lanzamiento del balon, la de otro esta causada por una ulcera de estomago cronica. Y hoy por hoy, la ciencia mide todas las lumbalgias por el mismo rasero, y ahi viene el error: no tratamos lumbalgias, tratamos pacientes, PERSONAS. Y la complejidad de cada persona es tal, que nunca podremos encontrar nada escrito que nos de la solucion (llamese ciencia, astrologia o curanderismo). Como bien siempre digo, SE CURA QUIEN QUIERE CURARSE. Para todo lo demas, Mastercard.

Si algo bueno tienen aqui, es que al menos tienen esta ultima parte bien clara. El paciente es la parte fundamental del tratamiento, y el Fisioterapeuta solo un guia que le ayuda a decir por donde tiene que ir. En Espana eso aun es muy dificil: el paciente viene a la clinica para que TU le soluciones el problema. O para que le des algo que le solucione el problema. Y si no se lo solucionas, eres muy malo. Perdone, pero el problema es suyo y lo soluciona usted. Yo si quiere le digo como, pero si no pone usted de su parte...

Debemos intentar huir de la tendencia general (no solo en la Fisioterapia, sino en todo lo demas) a la SUPERESPECIALIZACION. Hoy en dia parece que hay que ponerse la etiqueta de "especialista en", sin darnos cuenta de que eso nos estrecha las miras, nos cierra campos, y nos empobrece como terapeutas. Un fisio debe tener una vision mucho mas compleja, y sobre todo, un buen equipo de trabajo. Sin un equipo, no somos nadie. Lo mismo que un Cristiano Ronaldo sin un Kaka o un Xabi Alonso. Y lo siento, pero aun no he encontrado por ningun sitio un equipo como el mio. Puedo sentirme orgulloso de formar parte de el, pero mas orgullosos deberiais sentiros vosotros de tener a uno de los mejores equipos del mundo en Valladolid. Y lo digo sin temor a equivocarme. Que no hace falta irse a Madrid, ni a Massachussets, ni a Sydney. Calle Estacion, 7.

Desde la perspectiva que me dan mis 6 semanas aqui, puedo deciros que conocer a los mejores y aprender con ellos es una ayuda mas, pero solo eso. Un complemento a mi formacion importantisimo, que me da otros puntos de vista, y que cambiara muchos de mis conceptos y mis formas de trabajo, pero que no hara que me monte en el tren de la "moda Australiana". Prefiero seguir siendo un "fisio-esponja": absorber todo lo que pueda para despues escurrir lo que sobra y quedarme con lo importante.

domingo, 27 de septiembre de 2009

SYDNEY



Cuando el famoso Capitán Cook desembarcó en Port Jackson allá por 1788, no sabía que estaba dando lugar a una de las que hoy en día es una de las ciudades más emblemáticas del mundo: SYDNEY.
Poblada en principio por una pequeña tribu aborigen, lo que hoy conocemos como Sydney fue el asentamiento de la primera colonia de presos británicos a finales del siglo XVIII. El primer grupo de pobladores europeos comenzó aquí. En un principio se asentaron en The Rocks, en lo que hoy es uno de los lugares más visitados y fotografiados del mundo: Circular Quay, donde se encuentran el edificio de la Ópera y el Harbour Bridge.

Por lo demás, Sydney es una gran ciudad al estilo europeo, mezcla de edificios coloniales y rascacielos, pero con un toque diferente. En la actualidad Sydney alberga gente de todas las clases, pero sobre todo asiáticos. El chinatown de Sydney es tranquilamente comparable al de Nueva York, y doy fe que estoy al lado y no hay manera de encontrar un restaurante que no sea chino, taiwanés o japonés. Por otra parte, las tribus aborígenes que poblaban la zona, fueron desplazadas hacia el oeste, y aún hoy siguen reivindicado una tierra que es, o debería ser, suya. O al menos, compartida sin necesidad de marginación. Pero esa dichosa costumbre del hombre blanco de arrasar con todo... Otro día os hablaré de la cultura aborígen, que tiene mucha, mucha miga...

Aún teniendo un tamaño considerable (casi 4mill de habitantes), no se respira el aire de prisas, agobio y mogollón que podemos tener en Madrid, Nueva York o Londres. El espíritu australiano es mucho más tranquilo, y el clima también mucho más agradable. De no ser que venga una tormenta de arena. Pero tranquilos, eso para una vez cada 100 años, malo sea que os toque...jajaja.

Os acabo de soltar toda una charla de historia y humanidades, pero creo que siempre es importante conocer algo de la cultura de los sitios que visitamos. Es parte del intercambio cultural, y es lo que hace que viajar amplíe tus miras y te ayude a ser más tolerante con lo que tienes alrededor. Si en España aprendiéramos a mirar un poco más allá de nuestro ombligo, nos dejaríamos de tantas peleas entre nosotros y seguro que nos iba un poco mejor...

Por lo demás, en estos días he seguido con mis visitas a fisios. La visita estrella que tenía programada mañana, Jenny McConnell (una de las madres de la fisioterapia moderna), ha tenido que cancelar mi cita porque... le entregan mañana la Real Orden del Mérito Australiano (algo así como el Príncipe de Asturias en España). Todo un orgullo que se la entreguen el día que yo la iba a conocer, pero lo podían haber dejado para otra! Así que he tenido que pasar al plan B, y programar otra, porque ya no tengo más días para quedar con ella. A ver qué tal.

En cuanto a turismo, me he dedicado a patear toda la ciudad (la de km que habré hecho) guía y cámara de fotos en mano. Desde la famosa ópera, hasta los barrios más míticos, playas, monumentos, catedrales, y centros comerciales. La de centros comerciales que hay en esta ciudad!! He ido al cine IMAX más grande del mundo, subido a la torre más alta del hemisferio sur, y corrido por las calles con mi camiseta de España...jeje. De todo un poco!

Próxima etapa: NUEVA ZELANDA. Viajo el martes, y haré otra vez viaje-aventura alternativo con coche alquilado. La idea es visitar sitios recónditos y acercarme un poco a la misteriosa cultura maorí. Acabaré bailando la haka...?? Espero poder informaros desde allí!!

jueves, 24 de septiembre de 2009

TORMENTA DE ARENA EN SYDNEY. Comunicado oficial




COMUNICADO OFICIAL http://elfisioviajero.blogspot.com/





"SYDNEY, a 24 de septiembre de 2009


Ante los numerosos mensajes y emails recibidos, me veo en la obligación de emitir un comunicado oficial para transmitiros a todos que me encuentro bien, mi estado de salud es óptimo, y he salido vivo de la tormenta de arena del 23-S en Sydney.





Un saludo

DANIEL MARTÍNEZ SILVÁN.

El fisio viajero."


La verdad es que no he sido del todo consciente de la relevancia de la famosa tormenta hasta ayer por la noche cuando me dijeron que había salido en las noticias en todo el mundo.


Yo me levanté por la mañana, me asomé a la ventana, y lo vi todo tan borroso que pensé que era niebla. Pero cuando salí a la calle a coger la furgoneta me di cuenta del percal: estaba completamente cubierta de arena y había un vendaval huracanado que casi no se podía ni andar.

Yo pensando que esto sería relativamente frecuente aquí, no le di mayor importancia, sobre todo porque todo el mundo iba por la calle con mascarillas, y dije "joer, estarán acostumbrados...". La verdad es que no dejaba de toser todo el rato, y todavía por la noche después de ducharme seguía teniendo arena en el pelo...

Y esa fue mi primera mañana en Sydney!! Así que no pude ver nada de nada. Tampoco hubiera podido porque estaba visitando un centro de fisio, pero qué menos que un poquito de sol!





Una aventurilla más y otro.. "yo estuve allí"

UN ABRAZO A TODOS

martes, 22 de septiembre de 2009

BRISBANE-SYDNEY. Disfrutando de lo sencillo



Cuando las necesidades básicas pasan a ser la prioridad en el día a día, todo lo demás es... DISFRUTAR. Estamos tan acostumbrados a tenerlo todo, que hemos perdido el instinto de lo básico y hasta hemos dejado de valorarlo.
Después de mi aventura de varios días hasta llegar a Sydney, esta es mi mayor conclusión del viaje. He visto cosas geniales, pasado alguna que otra aventura divertida, y no tan divertida, pero sin duda me quedo con la sensación de haber sabido disfrutar de las cosas básicas y sencillas de la vida. El hecho de viajar en la furgoneta y tener que buscar día a día un sitio seguro para dormir, comer, agua potable o ducharme, han hecho que haya sido capaz de disfrutar de todo lo demás como si fuera la primera vez que hacía un viaje. Y es que estamos tan acostumbrados a tener cubiertas todas esas necesidades, que no sabemos valorarlas lo suficiente y gastamos energías en preocuparnos de si la comida está sosa, el agua sale fría o hay mucho tráfico en la Avda. Salamanca. La verdad es que era uno de mis objetivos del viaje, y he conseguido disfrutar de conducir tranquilo y sin prisas, disfrutando del paisaje, y parando cuando me apetecía. Sin hora de llegada ni salida y sin punto de partida ni llegada. Recorriendo playas recónditas o carreteras entre granjas, sólo para sentarme un rato y disfrutar del paisaje o de sacar una foto desde 15 planos diferentes. Esa es la única forma de valorar que lo importante de la vida son las cosas sencillas.


El viaje empezó con una variación de última hora, y es que en la primera etapa tuve acompañantes: 2 alemanas que buscaban gente que las llevara hacia el sur. Yo me ofrecía a llevarlas y así también se hacía el viaje un poco más ameno. Fuimos juntos hasta la Gold Coast, la gran zona turística de playa de la costa este. No duró más la compañía, porque la verdad es que ellas buscaban sitios puramente turísticos y de playa, y a mí me apetecía más ver la verdadera Australia, que para turismo de playa ya tengo Benidorm y Marbella al lado de casa... Y eso es precisamente la Gold Coast: explitación turística a tope y nada más.

Así que escapé de ahí en cuanto pude y al día siguiente ya seguía rumbo al sur parando en pequeños pueblecitos pesqueros y en playas plagadas de surferos, que siempre son el indicativo de calidad de una playa. Byron Bay, Coffs Harbour o Evans Heads fueron algunas de las paradas. En esta última, había quedado con otro de los múltiples primos que habitan la zona. Éste era profesor de surf, así que al día siguiente, clases gratis...jeje. Como bien me ponían en algún comentario, no conseguí aguantar ni 2 seg encima de la tabla!! Madre mía qué cosa más difícil! Pero bueno, la verdad es que pasamos un buen rato y disfruté bastante.
Por la noche llegué a Crescents Heads, uno de los sitios más bonitos de la costa. Se trata de un pueblecito típico de surferos y con poquitos turistas, así que es bastante auténtico. Aparqué la furgo donde pude para dormir, pero antes de quedarme dormido, tuve que llevarme el susto del día cuando un tío intentó abrir la furgoneta desde fuera... Más que querrer robarme creo que iba mamao... pero aún así eché patas y me cambié de sitio. Al día siguiente me desperté y desayuné en un acantilado con vistas al océano desde donde pude ver delfines y ballenas migrando al sur. Una auténtica pasada.
Luego seguí rumbo al sur parando en un montón de pequeñas playas y conociendo mucha gente peculiar por el camino. De hecho hubo un nativo tan peculiar que me invitó a su casa a tomar algo y me invitaba a quedarme a dormir. Pero parece ser que sus intenciones iban por otro lado... jajaja. Es triste pero es lo único que he ligado en el viaje....
Después de pasar una noche ya tranquila en Newcastle (aquí en Australia están repetidos casi todos los nombres de ciudades inglesas), el día fue bastante tranquilo. Viaje hacia las Blue Mountains, un Parque Nacional ya cerquita de Sydney. Para este viaje me inventé una ruta alternativa por carreteras secundarias, terciarias y hasta cuaternarias... Entre granjas y pequeños pueblos, y hasta llegué a una carretera que se cortaba en un río! Menos mal que había un ferry para pasar, porque en el mapa no decía nada...
Y por fin hoy amanecí en las Blue Montains. Para los que vengáis alguna vez por estas tierras, es una visita 100% recomendable. Un paisaje alucinante, con una selva espesa, cascadas y unos caminos por el bosque superchulos. Además tienen organizados unos viajes en teleférico y en un monorrrail que es el más empinado del mundo: doy fe.



Y hace unas pocas horitas por fin llegué a Sydney. Intentando buscar mi hostal con un triste medio-mapa donde no salían la mitad de las calles, y metido en un barullo de tráfico de cojones. Pero fiel a mí graaaaannn capacidad de orientación (y algo de suerte también), aparecí directamente en la puerta. Eso sí, con una tormenta de aúpa. Así que ya os contaré cosas de Sydney otro día, que hoy no he visto más que coches!


martes, 15 de septiembre de 2009

Codearse con los mejores

En esta vida hay que hacer de todo. Pasar buenos momentos, aprender de los malos, conocer gente, divertirse, trabajar, disfrutar... Hay tiempo para todo.

Para los que tenemos la suerte de tener pasión por nuestro trabajo, muchas de estas cosas giran en torno él (para lo bueno y para lo malo). Pasamos grandes momentos, hacemos grandes amigos, y recibimos de vez en cuando alguna satisfacción en forma de paciente curado o de un simple "gracias". Otras veces sufrimos como si nos fuera la vida en ello o nos desbordamos por la cantidad de cosas que queremos abarcar, y desgraciadamente no podemos. Por eso a veces hay que tomar un poco de distancia, reciclarse, y volver con energías renovadas (aunque sea a costa de venirse a la otra punta del mundo).


Uno de mis objetivos de venir aquí era reencontrarme conmigo mismo, y subir un pequeño peldaño en mi evolución profesional. Para eso no había más remedio que venir a ver de cerca cómo se las manejan los mejores e intentar aprender lo más posible. Y doy fe de que lo estoy consiguiendo, pero con pequeños matices.


A veces idolatramos de antemano a personas, sólo por las escasas referencias que tenemos de ellos. Nos pasa con deportistas, actores o escritores. Pero si alguna vez habéis tenido la oportunidad de conocer a alguno, os habréis dado cuenta de que son personas como tú y como yo, y eso, al menos a mí, me provoca una gran satisfacción.


Pues lo mismo me está pasando aquí. Estoy conociendo a los mejores, pero no sólo conociendo sino codeándome. En el mundo de la salud, a pesar de lo que crean algunos, no hay verdades absolutas. Nadie es mejor que otro. Todos podemos aportar algo, y siempre es gratificante darse cuenta de ello. La mejor sensación que me voy llevando por el momento no es la de aprender (que por supuesto estoy aprendiendo una barbaridad), sino la de poder compartir y debatir de tú a tú con gente que está a tan alto nivel.


La Fisioterapia Australiana tiene una grandísima fama, pero no nos engañemos. Tienen mucha más repercusión a nivel mundial que nosotros (el idioma ayuda mucho), tienen una gran organización y un gran nivel científico, una profesionalidad exquisita, pero a la hora del tú a tú... a la hora de tratar pacientes... ahí no hay ciencia que valga. Ahí lo importante está en ayudar a que el paciente mejore. Y eso, señoras y señores, también lo hacemos en Valladolid, en Cuenca, en Carballiño y en Corcos del Valle. Históricamente los españoles siempre hemos pecado de ese complejo de inferioridad, pero ya es hora de cambiar.


Aquí estamos, podemos estar con los mejores, y podemos ser los mejores. Fisioterapeutas, profesores, camareros, traductores y gerentes de concesionarios de coches. Pero trabajemos para ello, que aquí nadie regala nada.
Después de esta pequeña reflexión filosófica, os pongo al día de mis evoluciones. Mañana hago mi última visita en Brisbane a la Universidad de Queensland, y el jueves me voy rumbo a Sydney. Para este episodio, he alquilado unaa furgoneta-caravana (aquí ees algo muy común), y así tengo la libertad de ir parando donde buenamente quiera. Tengo cocina, depósito de agua, cama, y hasta DVD, así que va a ser divertido. Son unos 1000km de viaje, y espero hacerlos con tranquilidad en 4-5 días. Por el camino... una probable parada para un cursito de surf y espero que más aventuras interesantes.
No sé como lo tendré para manteneros informados, así que a lo mejor mi próxima entrada ya es desde Sydney... Un abrazo a todos

sábado, 12 de septiembre de 2009

Atardecer austral

Aquí os dejo algunas fotos de un atardecer austral espectacular. Sobran las palabras...



jueves, 10 de septiembre de 2009

Brisbane y algunas aventurillas...




Bueno, pues después de un inicio un poco trastabillado, por fin estoy en Brisbane.

Brisbane es la capital del estado de Queensland, y tiene 1'5 millones de habitantes. Se trata de una de las grandes ciudades australianas, que albergó la Expo'88 (justo antes que Sevilla) y los juegos de la Commomwealth. Tiene un centro lleno de rascacielos y está atravesada por el río Brisbane. En su origen, al igual que todo el estado australiano, fue un asentamiento de presos británicos. Y por aquí circula la leyenda de que Brisbane se fundó para alojar a los presos que no podían controlar en Sydney... Así que menuda joyita de antepasados!!

La verdad es que de la ciudad no he visto mucho. He estado bastante ocupado con mis visitas, pero como estoy alojado en pleno centro de la ciudad, de vez en cuando me doy un paseo entre rascacielos y por la orilla del río. Está bastante bien, y sobre todo, tiene mucho ambiente. Es una ciudad típica universitaria, así que hay mucha gente joven, y por lo tanto mucha fiesta. Esto último no me gusta mucho, porque yo soy un tío más bien casero. Tampoco me gusta tener justo debajo del hotel el mejor pub de la ciudad, que se llena a diario. Aún no he bajado ninguna noche ni nada, no, no....jajaaja.

Y fiel a mi estilo, ya he empezado con las aventurillas típicas de mis viajes. Para empezar, el primer día me alojé en casa de uno de esos múltiples primos lejanos que tenemos por aquí. Bueno, pues el alojamiento venía con sorpresita: era una de estas personas que acumulan todo tipo de trastos y basura en casa (síndrome de Diógenes). Lo más parecido que he visto en mi vida a una chabola, madre mía!! Así que al segundo día escapé de ahí como buenamente pude. Y por eso hice el sacrificio de alojarme en el hotel encima del bar...qué se le va a hacer

Al segundo día, me monto en un taxi para acudir a mi visita del día, y me atiende un tío con pinta de indio-Balngladesh-Nepalí, que no tenía ni papa de inglés. Por no saber no sabía ni teclear en el GPS, porque por supuesto no sabía ni donde estaba el sitio. Así que después de 10min de intentarlo me acabé bajando del taxi y montando en otro. Con tan mala suerte que cuando me bajé se me debió caer el móvil y... ya no tengo móvil. Así que no intentéis contactar conmigo.

Bueno, pues esta mañana voy a coger un taxi para ir a otro sitio, con tan buena suerte que estando en una ciudad con 1'5 millones de personas va y me toca con el mismo puto taxista del 1er día!!! Así que según me monté me volví a bajar...jajaja. Lo siento por el pobre chico, pero....


En cuanto a mis visitas a Centros de Fisioterapia Australianos, no podían ir mejor. El primer día visité a un tío especialista en problemas lumbares que escribió un libro bastante conocido hace unos años. Fue muy interesante pasar el día con él. El 2º día estuve con el fisio del equipo de rugby (deporte puntero en australia), y la verdad que me quede impresionado. Un despliegue de medios que ni los mejores equipos de futbol españoles, y una calidad en los tratamientos exquisita. Unos cracks!

Hoy he visitado otra clínica especialista en Pilates, y por la tarde al fisio del circuito de la PGA de golf, que es especialista en biomecánica. Es un tío puntero a nivel mundial, y me ha estado explicando el análisis en 3D que hacen del gesto deportivo. Hemos estado debatiendo varias cosas pero parece ser que puede salir algo interesante de este contacto. La verdad es que sin excepción todo el mundo me está tratando genial, y estoy gratamente sorprendido de la amabilidad de los australianos.

Este fin de semana aún no tengo plan definido: puede ser desde salir a navegar y ver ballenas y delfines en una isla, hasta irme a la costa a tirarme en la playa, hasta hacer visita turística. El próximo dia os cuento.

Y aquí os dejo una pequeña sorpresita que os he preparado para hoy...

domingo, 6 de septiembre de 2009

Y de despedida...UNA BODA TROPICAL!! Adiós Townsville!




Se acabó la primera etapa del viaje. Dejo atrás Townsville y North Queensland y ya estoy en la gran ciudad: BRISBANE. La verdad es que la despedida no ha podido ser mejor. He tenido el privilegio de vivir desde dentro algo tan especial como es una boda. Luke Martinez, uno de los hijos de la familia con la que he estado, se casaba ayer con July (una preciosidad australiana), en la paradisíaca isla de la que ya os hablé hace un par de semanas: Magnetic Island.


Las bodas aquí siguen un poco la tónica de la cultura australiana, y son mucho más informales de lo que estamos acostumbrados en España, cosa que personalmente me parece genial. La ceremonia es un puro trámite para firmar papeles que dura 15min. Pero cuando se hace a la orilla del mar en una playa paradisíaca, con un sol espléndido y con buena música de fondo...la cosa cambia. Pasa a formar parte de esas imágenes inolvidables que uno guarda siempre. De hecho creo que yo era el tío más emocionado de toda la boda...


Por lo demás, cosas típicas de las películas americanas, como que no se encarga la organización a ninguna empresa ni nada parecido. Allí estábamos todos poniendo nuestro granito de arena, hinchando globos, colocando manteles o encendiendo velas. El equipo de sonido y el encargado de la música...un amigo. El video de la boda...otro amigo. Corbata...prohibido (ni siquiera el novio llevaba). Con este último tema estaba encantado, que los que me conocéis ya sabéis lo mal que nos llevamos los formalismos y yo.


Despues...no hay cena. Sólo se da un cócktail con canapés. Esto no me hizo tanta gracia: con la de centollos, gambas y ostras que tienen aquí, y yo comiendo canapés! Si todavía fuera chorizo...(os he comentado ya que sueño con chorizo??)

En mitad del baile, los padres de los novios cogen el micrófono y dicen bonitas palabras de sus hijos y esas cosas tan típicas de los americanos. Luego pasamos al baile donde brillan con luz propia los guiris bailando totalmete arrítmicos y descoordinados, las solteronas que se pelean por bailar con el españolito de turno (VER EJEMPLO), y los borrachos que se arrancan a hablar español a la 16ª cerveza. Algo básico tipo "vamos a la playa", "salud, amor y pesetas" cuando brindan (de verdad creerán que aquí decimos eso??), o el ya clásico "viva la fiesta". Esta última parte de los borrachos creo que ocurre en todas las bodas del mundo...


En fin, que todo es mucho más familiar y sin tanta parafernalia, cosa que hemos perdido en España con tanta lista de bodas, fotógrafo profesional, marcha nupcial (qué música más cutre, por Dios!), y viajes de novios a cojón de mico.


Un bonito broche final para mi periplo por el norte de Queensland. Puedo decir que me he sentido un "aussie" más, y que estoy muy agradecido a todos los que han cuidado de mí a 15.000km de casa. Y aprovecho también para agradeceros también a todos los que estáis siguiendo mi blog, que sois muchos mas de los que pensaba!!


Ahora empieza la vida en la gran ciudad y mi primera toma de contacto con los compañeros fisios australianos. Os mantendré informados!

miércoles, 2 de septiembre de 2009

NORTH QUEENSLAND: UN VIAJE INOLVIDABLE



Lo bonito de un viaje no es lo que ves, sino las condiciones en las que lo ves. A veces guardas recuerdos inolvidables de cosas que, vistas por segunda vez, no son para tanto. Pero si unes unas condiciones ideales con un viaje perfecto, es muy fácil que consigas ese tantas veces deseado "Viaje inolvidable". Y eso es precisamente lo que yo he tenido estos últimos 4 días.
El sábado por la mañana, emprendimos viaje hacia North Queensland. Iba acompañado de Rod Martínez, primo australiano, que está ejerciendo de anfitrión y mucho más que eso. Eso es precisamente lo que ha hecho el viaje un poco más especial, el hecho de hacerlo guiado por un nativo.
Queensland es uno de los 6 estados de Australia, y uno de los más grandes. Para que os hagáis una idea, es 3'5 veces la superficie de España, pero sólo tiene una población de 2'5 millones de habitantes. Es decir, como la mayor parte de Australia, la gran mayoría está deshabitado. En general Queensland es uno de los destinos preferidos de los turistas, por sus increíbles playas, y sobre todo por la cercanía de la Gran Barrera de Coral, un paraíso natural para buceadores, surferos, pescadores, y cualquier persona con 2 dedos de frente. Sin embargo, la idea era conocer la verdadera Australia y no visitar simplemente los destinos turísticos, y eso ha sido lo más increíble del viaje.

EL PRIMER DÍA, emprendimos rumbo al norte de Queensland, parando en todos los parajes incomparables que nos encontrábamos, con la idea de llegar a dormir a Cairns, uno de los puntos turísticos por excelencia (que también hay que visitarlos). En el camino, visitamos el Hartley's Park Creek, un parque natural con cocodrilos, canguros, koalas, y toda la fauna típica australiana. Lo bueno es que no se trataba de un zoo, sino que simplemente tenían las especies que vivían en la zona en su hábitat natural. De todos, me quedo con el koala por lo simpático, y con el cocodrilo por lo espectacular.

EL SEGUNDO DÍA lo puedo describir sin duda como uno de los mejores de mi vida. A 1ª hora de la mañana montaba en un barco destino a la gran barrera de coral. El barco llegaba a una base flotante que tiene establecida en el arrecife, y desde donde se tiene acceso al coral, ya sea buceando o con snorkel. Yo, con mi recién estrenado carné de buceador, me animé a lo primero, y es lo mejor que he hecho en mi vida. Una vez desciendes ahí abajo, el agua es totalmente cristalina, y tienes una visibilidad de unos 15-20m, lo que te permite apreciar la increible belleza del mundo submarino. Totalmente poblado de peces de todos los colores y formas posibles (he visto a todos los personajes de Buscando a Nemo), era realmente como bucear en un acuario, sólo que esto era de verdad!! Así que en la segunda inmersión alquilé una cámara subacuática porque no podía dejar de enseñaros los que he visto... (para los listillos, prometo que todas las fotos son mías y no del Google, eh?...)


EL TERCER DÍA fue el día de los contrastes. Por la mañana subí en un teleférico que te lleva desde la costa hasta las montañas atravesando la selva. Una auténtica pasada ver lo densa que puede llegar a ser la vegetación ahí dentro. Y sobre todo escuchar los sonidos de todo tipo de pájaros tropicales y bicharracos raros. Por la tarde, con el coche rumbo a la aventura, a intentar llegar a dormir a un sitio de acampada libre. Por el camino, paisajes que cambian constantemente del selvas frondosas a terrenos áridos en cuestión de minutos. Nos adentrábamos en la verdadera Australia. Paramos en varios bares de carretera (aquí les llaman hoteles, así que si venís y queréis dormir, no preguntéis por un hotel que os mandan a un bar...), y hablamos con todo tipo de nativos de sombrero y todoterreno. Unos personajes!! Por fin llegamos a nuestro sitio de acampada, encendemos un fuego en el medio de la nada, y nos vamos a dormir...



EL CUARTO DÍA ha sido quizá el más auténtico. Después de pasar la noche a la intemperie (para los que esperábais una gran aventura tipo "serpientes que vienen en mitad de la noche" etc., os desilusionaré diciendo que estaba tan cansado que no me enteré de nada) me despertaron los pajarracos estos que no hacen más que chillar. Así que con la fresca de la mañana decidí salir a hacer unos kilómetros para soltar las piernas y.... sorpresón! De repente unos 15 canguros que salen de la nada y cruzan por delante de mí. Al principio un susto que no veas (son bichos que miden 1.50-1.60), pero después me quedé fascinado al ver cómo unos pasaban saltando y otros se quedaban parados. Una auténtica pasada verlos en libertad!


Desde ahí emprendimos vuelta a Townsville, pero en vez de volver por la costa lo hicimos por el interior, adentrándonos unos 200km tierra adentro. Es increíble ver como a tan poca distancia de la costa puede haber...NADA. Te cruzas un coche cada 50km...con suerte. Y pasaron 300km hasta ver una gasolinera con una pequeña tienda (no le auguro un gran éxito al negocio, la verdad). Y en todo esto, estamos hablando de una zona que aún está poblada, así que ni me quiero imaginar cómo será el desierto.

Como curiosidad, contaros que si vas en coche y tienes que cruzar las zonas despobladas, recomiendan informar de tu iteinerario a la policía y llamarles cuando llegues para decir que estás bien. De lo contrario, si no saben de ti en varios días sobreentienden que algo te ha pasado... Y como pa encontrarte!!!


De momento, me quedo cerquita de la costa...

miércoles, 26 de agosto de 2009

OTRO MUNDO




Aquí estoy, recién llegado de visitar otro mundo. No me he fumado un porro ni me he comido un tripi... he estado 3 días buceando en Magnetic Island, una especie de isla paradísiaca muy cerca de Townsvillle. Y digo otro mundo, porque nunca había sentido la sensación de estar en una isla de verdad. La sensación de soledad, de silencio, de árboles, pájaros, playa y poco más. Una gozada!!




Magnetic Island debe su nombre al capitán inglés James Cook, uno de los grandes descubridores de Australia. Cuando se acercaba con su barco a la isla, notó que de repente la brújula se volvió loca, y la aguja no dejaba de dar vueltas. Decidieron que debía haber algún campo magnético especial en la isla y de ahí el nombre. Curioso cuanto menos, porque ni campo magnético ni pollas en vinagre. Lo que pasó fue que se le petó la brújula y no sabía que excusa poner al becario que tenía en prácticas ese mes y se le ocurrió esa tontería... Menos mal, porque sino le habrían puesto "Petated Island"...




Y después de esta bonita lección de historia, os contaré que el otro mundo al que me refiero es el MUNDO SUBMARINO. He aprovechado para hacer el curso de Buceo en aguas abiertas, en la gran barrera de coral. Es una maravilla la cantidad de cosas y de seres vivos que puede haber ahí abajo. La variedad de colores y formas es infinita, y hasta hemos visto un tiburón!! Por lo que dicen aquí, buceando no suponen ningún tipo de peligro, es más, tienden a huir como en este caso. También pececillo de colores tipo "Buscando a Nemo", mantas, y otros tantos de los cuales no me sé el nombre en español, así que como para saberlo en inglés cuando lo decían...




Una experiencia que os recomiendo a todos!!